Sucedió Algo extraño en el lugar de la explosión.

Una residente de la zona cercana al lugar de la explosión en San Cristóbal compartió una experiencia sumamente inusual que tuvo lugar en su localidad durante las primeras horas de la madrugada.

En primer lugar, relató que la noche posterior a la tragedia, varios individuos irrumpieron en varias viviendas con intenciones de robo. Según su versión, los delincuentes fueron aprehendidos y presentados ante miembros del Ejército Dominicano que estaban apostados en la zona. Sin embargo, sorprendentemente, los soldados respondieron que su misión no era la captura de ladrones.

La mujer siguió con su narración, describiendo cómo en las primeras horas de la madrugada se desató una movilización poco común de ambulancias, personal militar y equipos caninos en la zona. Intrigada por la intensidad de la actividad a esa hora de la noche, decidió indagar sobre la razón detrás de tal movimiento, especialmente porque asumía que la mayoría de los heridos ya habían sido rescatados. Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos, no logró obtener una respuesta que satisficiera su curiosidad.

En su testimonio, la residente añadió que durante esas mismas horas de la madrugada, observó a perros y alrededor de cuatro ambulancias retirando algo desconocido de entre los escombros. Aunque no pudo afirmar con certeza qué era exactamente lo que estaban sacando, expresó sus sospechas de que podrían tratarse de cadáveres.

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