Ramón Hernández

Ramón Hernández, reconocido primera base bicampeón de los Tigres del Licey, resalta la armonía, el enfoque y la dedicación que definen los entrenamientos del equipo. Según Hernández, el ambiente dentro del conjunto azul refleja un nivel elevado de compromiso y preparación, lo que se ha hecho evidente en la actitud de los jugadores.

"Estoy agradecido por unos nuevos entrenamientos, una nueva oportunidad. Estamos positivos, llegamos con la misma mentalidad, manteniendo la armonía. Los muchachos están muy enfocados", expresó el pelotero. Hernández destacó que algunos jugadores incluso comienzan a entrenar desde las 6:30 a.m., lo que demuestra la seriedad con la que enfrentan la temporada.

El bicampeón también subrayó el progreso de las jóvenes promesas del equipo, como Starlyn Caba y Cristian Hernández, últimos picks de primera ronda del Licey. Hernández se mostró impresionado por la madurez de estos jugadores, quienes constantemente buscan aprender y mejorar.

"Han mostrado un intenso deseo de aprender", afirmó, reconociendo el esfuerzo y compromiso de los nuevos integrantes.

A pesar de haber perdido la titularidad en la pasada temporada, Hernández continuó siendo un pilar desde el dogout, aportando en todo momento al equipo. Su filosofía de vida, inculcada por su padre, es: "De pequeño mi papá me enseñó que si no me toca la oportunidad de jugar, debo tratar de aportar desde el rol en el que esté. Eso he hecho, tratar de dar el 100% de mí, no importa dónde me encuentre. Mantenerme ready para apoyar a los compañeros y ellos para mí. Esa es la clave de este equipo, cuando uno se cae el otro lo levanta", comentó, subrayando la unidad que caracteriza a los Tigres.

Hernández también viene de una sobresaliente actuación en la Liga Mexicana de Beisbol, donde con los Acereros de Monclova conectó 22 jonrones y remolcó 71 carreras en 82 juegos, con un promedio de bateo de .313 y un OPS de .945. "Gracias a Dios me fue bien, estuve haciendo ajustes", mencionó, refiriéndose a su trabajo en mejorar su tiempo de reacción ante lanzadores que cada vez lanzan con más velocidad.

Con su liderazgo y esfuerzo constante, Hernández sigue siendo una figura clave en el equipo y un ejemplo para los jugadores más jóvenes, destacando la importancia de la preparación y el compromiso en el éxito del conjunto.