Juan Soto firma con los Mets con un gigantesco contrato de 765 millones de dólares.

En un movimiento monumental, Juan Soto acordó un contrato sin precedentes de 15 años por 765 millones de dólares con los Mets de Nueva York, según fuentes confiables, marcando un inicio explosivo para las Reuniones de Invierno.

Este acuerdo no solo supera el contrato de Shohei Ohtani con los Dodgers por 700 millones de dólares, sino que establece un nuevo récord en el béisbol profesional. El valor actual de este contrato eclipsa acuerdos anteriores y subraya la apuesta de los Mets por consolidarse como una potencia en la MLB.

A sus 26 años, Soto llega a los Mets como una figura central, formando una poderosa dupla con Francisco Lindor. Este movimiento coloca a los Mets como un contendiente serio, con una alineación que podría rivalizar con cualquier otra en el béisbol.

Soto viene de una temporada impresionante con los Yankees, donde bateó .288/.419/.569 con 41 jonrones, la cifra más alta de su carrera. Su incorporación supone un cambio significativo en las aspiraciones de los Mets.

Los Yankees intentaron retener a Soto con una oferta de 16 años y 760 millones de dólares, pero fue la visión y estrategia del propietario de los Mets, Steve Cohen, lo que inclinó la balanza. Este contrato no solo es una victoria para los Mets, sino también un golpe directo a sus rivales de Nueva York.

La llegada de Soto podría redefinir el futuro del equipo:

• Pete Alonso, también representado por Scott Boras, buscará su propio acuerdo a largo plazo.
• Starling Marte podría ser canjeado, aunque también podría ser utilizado como bateador designado.
• Los Mets han fortalecido su pitcheo con las incorporaciones de Frankie Montas y Clay Holmes, mostrando un enfoque integral en su roster.

Con este movimiento, los Mets buscan consolidarse como una fuerza dominante en la MLB, apuntando a mejorar su desempeño tras llegar al Juego 6 del Campeonato de la Liga Nacional la temporada pasada.

La adquisición de Juan Soto no solo revitaliza la esperanza de los fanáticos de los Mets, sino que también reescribe las reglas del juego en la agencia libre, marcando el comienzo de una nueva era para el equipo y para el béisbol.