La comunidad de Los Botados, en Yamasá, vive momentos de angustia ante la desaparición de Manuel Severino, de 56 años, quien fue arrastrado por las aguas del río La Leonora la noche del viernes.
Un trágico accidente bajo lluvias torrenciales
Manuel regresaba de una actividad política del PRM cuando las intensas lluvias inundaron el área. Viajaba en motocicleta junto a una acompañante, quien logró ser rescatada con heridas en las piernas, pero él fue arrastrado por la corriente y hasta el momento no ha sido localizado.
Dolor familiar y falta de respuestas
Su hija, entre lágrimas, expresó la desesperación que vive su familia. «Uno no sabe lo que va a hacer, uno no duerme», comentó, mientras detallaba que se ofreció traer drones para apoyar la búsqueda, pero estos aún no llegan.
La madre de Manuel, una mujer de avanzada edad, imploró ayuda para poder darle una cristiana sepultura a su hijo. «Solo quiero encontrarlo para que pueda descansar en paz», dijo con evidente dolor.
La búsqueda: esfuerzos y frustración
Equipos de la Defensa Civil han logrado recuperar la motocicleta destruida, pero no han podido localizar a Manuel. La búsqueda, que lleva cuatro días, fue suspendida temporalmente y se espera que se reanude mañana.
Sin embargo, los familiares y vecinos instan a las autoridades a actuar con mayor rapidez. «No podemos esperar más», expresó otra hija de Manuel, quien mostró frustración por la falta de recursos y apoyo en las labores de rescate.
Un hombre querido por su comunidad
Manuel Severino, conocido por su servicio y compromiso con el PRM, trabajaba como conserje en una escuela pública y era admirado por su dedicación a la comunidad. Su desaparición ha dejado un vacío entre sus seres queridos y vecinos, quienes siguen esperanzados en que sea encontrado.
Llamado urgente a las autoridades
Los familiares han solicitado que se reanuden las operaciones de búsqueda con mayor intensidad, utilizando todos los recursos disponibles para dar con su paradero.
Este caso refleja la vulnerabilidad de muchas comunidades frente a fenómenos naturales y la necesidad de fortalecer los protocolos de rescate y asistencia en situaciones de emergencia. Mientras tanto, Yamasá se une en oraciones y solidaridad con la familia de Manuel Severino, esperando pronto hallar respuestas.